La cúrcuma es una especia de color amarillo que se utiliza ampliamente en la cocina para dar color y sabor a muchos platos. El problema ha llegado cuando recientemente se ha promocionado como un potente agente natural con efectos medicinales.
La sustancia a la que se le atribuyen todos los méritos es la curcumina, una de las moléculas que componen la cúrcuma. Sin embargo, han sido muchos los científicos que se han unido para crear una revisión completa y crítica sobre las investigaciones que se han realizado hasta el momento sobre este compuesto que se promociona como milagroso y muy beneficioso para la salud.
La cúrcuma se ha propuesto como tratamiento para el Alzheimer, la disfunción eréctil, la alopecia y algunos cánceres. Sin embargo, en ningún momento se ha probado y demostrado su eficacia realmente. A pesar de que se han realizado miles de trabajos de investigación y se han llevado a cabo más de 120 ensayos clínicos con curcumina, los resultados de la revisión concluyen que no existen pruebas de que la cúrcuma tenga ningún beneficio terapéutico específico.
La cúrcuma no tiene efectos medicinales demostrados
Para comprobar si un compuesto químico puede tener algún tipo de uso farmacológico se suelen hacer pruebas para ver cómo se une a ciertas proteínas implicadas en la enfermedad. La unión se demuestra porque se genera fluorescencia. Sin embargo, algunas moléculas, como la curcumina, emiten fluorescencia de manera natural sin unirse a ninguna proteína, por lo que no se puede usar la fluorescencia como prueba de señal de unión a la proteína.
Los extractos de curcumina no son puros. Fuente: Pixabay
Lo que la curcumina puede hacer es destruir la membrana celular, inutilizando de esta forma los ensayos que intentan hallar fármacos que se dirijan específicamente a la membrana celular. Además, estas sustancias también pueden degradarse en otros compuestos, con propiedades diferentes o pueden contener impurezas con actividad biológica propia.
«Mucho esfuerzo y financiación se ha desperdiciado en investigación sobre la curcumina«, dijo Gunda Georg, co-editor de la revista «Journal Of Medicinal Chemistry» en la que se ha publicado la revisión que demuestra que la cúrcuma no tiene efectos medicinales. Según los autores de la revisión, el problema reside en que muchos investigadores no saben exactamente qué molécula están estudiando.
Los extractos de cúrcuma contienen decenas de compuestos diferentes a parte de la curcumina. Además, la curcumina en sí es una abreviatura que se refiere a tres moléculas estrechamente relacionadas. En algunos casos, los investigadores han observado efectos biológicos prometedores, pero no pueden saber a qué molécula atribuirlo.
Por el momento todos los estudios sobre los efectos medicinales de la cúrcuma son confusos
Más de 15 artículos sobre la curcumina se han retraído desde el año 2009 y más de una decena se han tenido que corregir. A pesar de ello, muchos investigadores siguen siendo optimistas respecto a la curcumina. «Existe evidencia de que la actividad biológica de la cúrcuma es real«, dijo Julie Ryan, oncóloga de la Universidad de Rochester. Ryan ha probado la curcumina en ensayos clínicos de dermatitis en más de 600 pacientes.
A pesar de que no encontró ningún efecto significativo, ella piensa que hay tendencias que necesitan un mayor estudio. Además, opina que las formas químicamente modificadas de la curcumina podrían resultar más eficaces.
Sin embargo, la revisión muestra que obtener pruebas reales se convierte en una tarea dificil. Es probable que los extractos de cúrcuma o curcumina tengan algún efecto beneficioso real, pero llegar a la parte inferior de eso es complejo y podría ser imposible, ya que por el momento sólo se han conseguido estudios confusos y de dudosa interpretación.
