Un equipo de científicos de Corea del Sur ha encontrado una manera de eliminar las placas amiloides (placas seniles), depósitos extracelulares de beta-amiloide que podemos encontrar en la sustancia gris del cerebro y que están asociadas con la degeneración de estructuras neuronales y son elementos característicos de la enfermedad de Alzheimer. Las pruebas realizadas en ratones son muy optimistas y las mejoras a nivel cognitivo y en las habilidades de memoria han aumentado significativamente.
Así pues, según el estudio publicado en la revista Nature Communications, la enfermedad del Alzheimer está estrechamente relacionada con la formación de placas seniles alrededor de los huecos entre las células nerviosas del cerebro, a través de las cuales se transmiten señales. Estas placas se generan cuando aparece la proteína beta-amiloide y precisamente la investigación consistía en descomponer dicha proteína del cerebro en una sola unidad. ¿Lo habrán conseguido?
Una nueva molécula EPPS sería capaz de acabar con las placas amiloides
El equipo de investigadores buscó una forma de eliminar la proteína beta-amiloide del cerebro de los ratones y para ello proporcionaron agua potable a los mismos con una pequeña molécula llamada EPPS que se adhiere a las agregaciones de beta-amiloide y las descompone en una sola unidad.
Esta nueva molécula no sólo se encarga de romper las proteínas anteriormente mencionadas, sino que además se ha visto como los ratones enfermos de Alzheimer veían mejorados sus problemas de aprendizaje y memoria.
El experimento «proporciona claras evidencias de que la acumulación de placas seniles subyace a la enfermedad del Alzheimer» y aunque aseguran que la molécula EPPS utilizada probablemente no sea capaz de curar a los pacientes con Alzheimer, sí se muestran muy optimistas a la hora de asegurar que este descubrimiento podría frenar la degeneración neuronal del cerebro y proporcionar así una mejor calidad de vida a todos los pacientes.
Fármaco Experimental Contra el Alzheimer con Efectos Anti-Envejecimiento
Sin embargo y aunque es evidente que estamos ante otro gran descubrimiento de la ciencia, los expertos aseguran que no hay que sacar conclusiones precipitadas ya que es demasiado pronto para saber con certeza si este tratamiento tendrá un mismo efecto en pacientes humanos. Aún así, parece evidente que los científicos buscan de forma constante una mejora en el tratamiento del Alzheimer y es posible que la molécula EPPS junto a la ruptura del enlace beta-amiloide situado en el cerebro arroje algo de luz en la búsqueda constante de la cura contra la demencia.
