En vez de esterilizar o castrar a los animales, podría conseguirse que con una simple inyección se controlara la población de animales callejeros. Investigadores han desarrollado una inyección de ADN que es capaz estimular a las células musculares para que produzcan anticuerpos que impidan la producción de óvulos y espermatozoides. Estas inyecciones han sido probadas en ratones y han funcionado.
Estos hallazgos han sido publicados esta semana en la revista «Current Biology«. Ya existen ciertas vacunas que desencadenan una respuesta inmune contra las hormonas reproductivas. Pero esta técnica, llamado inmunoanticoncepción, al igual que otras vacunas, la respuesta inmune puede disminuir con el tiempo. En las últimas décadas, se ha demostrado que se pueden expresar altos niveles de anticuerpos para prevenir enfermedades, por lo que los investigadores se plantearon si no sería posible hacer lo mismo para manipular la fisiología reproductiva.
Las células musculares son estimuladas para producir un anticuerpo determinado
Para encontrar un método de castración no quirúrgico de larga duración o incluso permanente, los investigadores recurrieron a un anticuerpo que es capaz de neutralizar la hormona liberadora de gonadotropinas (GnRH). Esta horma se sintetiza en el cerebro y es la encargada de promover la síntesis de aquellas sustancias que estimulan el desarrollo de los espermatozoides y los óvulos. Lo que hicieron fue muy curioso: introdujeron el gen del anticuerpo anti-GnRH dentro de la «carcasa» de un virus que es capaz de infectar a los mamíferos pero que no les produce síntomas ni enfermedad.
De esta forma, cuando esto se introduce el ADN empaquetado en el virus en el cuerpo del animal, a través de una inyección en el músculo, las células musculares utilizan ese ADN para producir los anticuerpos. Las inyecciones no parecen tener ningún efecto secundario, después de dos meses de recibir la inyección, todos los ratones se volvieron infértiles. Ese retraso de dos meses se debe al tiempo que necesita el músculo en producir suficientes anticuerpos.
Además, el equipo también logró hembras de ratón infértiles mediante el uso de un anticuerpo que se une a la zona pelúcida de los óvulos, esta es una capa de proteínas muy importante para la supervivencia de los óvulos, sin esta membrana el óvulo queda inutilizado. De esta forma, se podría conseguir infertilidad sin interferir en los niveles hormonales.
Sería un método no invasivo y sus efectos podrían ser permanentes
La castración de animales salvajes no es un proceso trivial, se necesita mucho tiempo y dinero para capturarlos, anestesiarlos, realizarles la cirugía, que se recuperen y volver a liberarlos. Esta sería una forma mucho menos invasiva para el control de las poblaciones callejeras o salvajes. El mismo equipo se encuentra actualmente llevando a cabo un estudio similar en gatas.
¿Qué opinión merece esta nueva técnica? Si quieres conocer algo más sobre los nuevos métodos anticonceptivos que están en desarrollo, te animamos a que leas nuestro artículo sobre un MicroChip Anticonceptivo. Esta inyección resulta realmente atractiva y no solo para ser usada en animales, le vemos muchas posibilidades para el control de la natalidad en humanos.
