Durante la década de los 90 fue muy conocido el descubrimiento de un embrión de dinosaurio en Henan, China. Fue conocido mundialmente como Baby Louie, sin embargo, no ha sido hasta ahora que han podido identificar la especie a la que pertenecía. Un equipo de investigadores internacionales ha llegado a la conclusión de que se trata de una especie de dinosaurio gigante de Oviraptorosaurio.
Varias instituciones chinas, canadienses y eslovacas se han unido para identificar por fin, la especie a la que pertenece el embrión de dinosaurio hallado en los años 90. Los Oviraptorosaurios fueron unos dinosaurios que habitaron la Tierra hace 90 millones de años. Eran animales que podían llegar a pesar 3 toneladas y por su gran parentesco con las aves, tenían plumas e incubaban sus huevos en enormes nidos.
Según afirma Darla Zelenitsky, investigadora y profesora de la Universidad de Calgary, en Canadá, que participó en el estudio: «Este oviraptorosaurio en particular habría sido un ejemplar gigante en comparación con la mayoría de sus parientes más cercanos. Estos dinosaurios eran robustos y tenían un pico desdentado. También solían presentar una cresta en la parte superior de la cabeza y la mayoría estaban cubiertos de plumas«.
Los huevos de los Oviraptorosaurios medían 45 cm de largo y pesaban 5 kg
Los restos fósiles de este embrión de Oviraptor fueron recogidos por agricultores de Henan en el año 1993 y fueron exportados a Estados Unidos. Después de 20 años fuera de China, los restos por fin han vuelto y han podido ser estudiados adecuadamente. El estudio que los describe y clasifica sido publicado en la revista «Nature Communications«.
Esquemas de las reconstrucciones del esqueleto del fósil de dinosaurio hallado en Henan. Fuente: Zhao Chuang
Una nueva especie de dinosaurio ha sido nombrada como Beibeilong sinensis o Dragón Bebé de China. Según comenta Zlenitsky, «los embriones de dinosaurio son extremadamente raros y este descubrimiento nos ha ayudado a entender cómo crecieron y cambiaron los dinosaurios a lo largo de su vida. Por el tamaño del huevo podemos saber que los oviraptorosaurios gigantes crecían con rapidez«.
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Este podría ser uno de los dinosaurios más grandes jamas conocidos que ponga huevos y cuide de sus crías. Las características de los huevos son espectaculares. Medían 45 cm de largo y pesaban alrededor de 5 kg. Por lo que podrían ser los huevos de dinosaurios más grandes que se hayan encontrado nunca. Se encontraron en una zona de puesta con forma de anillo de entre dos y tres metros de diámetro. Lo que denota claramente que estaban en un nido que probablemente contenía muchos más huevos.
La investigación se ha centrado en analizar los huesos del embrión que probablemente murió al eclosionar uno de los huevos. Durante muchos años se ha especulado sobre qué tipo de criatura pondría esos enromes huevos y crearía los nidos. En la misma zona de China, en las rocas de Henan, también se han hallado fósiles de grandes terópodos como los tiranosaurios, por ello en un principio se pensó que los huevos podrían pertenecer a un Tiranosaurio.
Ahora gracias este análisis en profundidad de los restos fósiles de un embrión de dinosaurio sabemos que los huevos pertenecían a un gigante oviraptorosaurio. Una especie de dinosaurio con un gran parentesco con las aves casuarias. Sin duda hubiera sido un gran espectáculo poder observar como un animal de tres toneladas incubaba sus huevos.
