El Instituto Nacional de Salud (NIH) de EE.UU ha anunciado recientemente el cierre de toda actividad relacionada con la investigación médica en chimpancés. Así pues, los 50 primates que se mantenían para este propósito serán trasladados a refugios protegidos para que puedan seguir viviendo el resto de sus vidas con total normalidad.
Además, como hemos podido saber, el director del NIH, Francis Collins, ha anunciado que los 82 chimpancés restantes propiedad de otras instalaciones de investigación médica que colaboran con el NIH también serán puestos en libertad próximamente.
Los chimpancés serán destinados a un refugio en Keithville (Louisiana)
Alrededor de 310 chimpancés fueron retirados de la investigación el pasado 2013 siguiendo las recomendaciones del Instituto de Medicina (IOM). Además, el Instituto trazó una serie de condiciones para permitir experimentos con los 50 chimpancés restantes. De hecho, el gobierno de Estados Unidos proporcionó a los chimpancés los mismos derechos de protección que a las especies en peligro, lo que significa que no se podían practicar investigaciones invasivas con los mismos.
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Los chimpancés han sido utilizados para la investigación debido a que son genética y fisiológicamente muy similares a los seres humanos. Sin embargo, ahora se tendrán que utilizar otros animales para dicha finalidad, a pesar de que la decisión no ha contentado a toda la comunidad investigadora.
Allyson Bennet, una psicóloga del desarrollo de la Universidad de Wisconsin-Madison, ha sido una de las que ha mostrado su descontento con la decisión del Gobierno. Asegura que los santuarios a los que serán enviados y refugiados los simios no cumplen con las mismas normas de bienestar que los centros apoyados por el NIH, por lo que eso puede poner en peligro el bienestar de los mismos.
Peter Walsh, quien estaba liderando un estudio para desarrollar una vacuna contra el Ébola en chimpancés salvajes utilizando especímenes en cautividad de la Universidad de Louisiana, ha asegurado que con esta decisión su trabajo y esfuerzo se ha visto paralizado, quizás para siempre. «Realmente no tenemos otro lugar para realizar las pruebas«, aseguró él mismo a la revista «Nature«.
